Estos vinos los beberemos en enero o febrero

Hoy, para festejar los nuevos contratos, hemos sacado tres vinos jóvenes y baratos. Los súper buenos lo sacaremos en la fiesta con Eze muy arriba. Intentaremos que vengan Jóse, Anabel y la infanta 

El año que entra ahora - tras las minusvalías para compensar otras plusvalías- será el de las cenas y meriendas con spatadantzas y ochotes de orfeón en casa de los Murry,  así como con bebidas que obtuvieron premios mundiales ( Castillo de Ygay, etc.) y canciones a coro. Por consiguiente, cantemos. Una suerte hacer este viaje con Jose y Anabel en el avión o helicóptero del presi. Yo llevaría tres pibones de ojos soñadores.

Esto marcha viento en popa

Nyeso: dominas el escenario de la conocida como aristocracia industrial. Tu apellido no es vascongado pero quizás lo sea tu madre, tu tío, tu abuela o bisabuela. No eres de Neguri porque aunque citas bien a las familias, hay algún pequeño error y faltan otras, como los Murrieta de Santurce que marcharon al Perú a hacer fortuna y conocieron en Ayacucho  a un joven comandante de muy mala milk que, con el tiempo, sería el general Espartero, quien al huir a Londres hostigado por Narváez y Seoane se refugió en la próspera casa de Banca que, para entonces, tenían allí los Murrieta. Lo de Cuzcurrita ( Alacha) me hace pensar en que puedas estar relacionado con Bermeo. Jelins: la junta es virtual.

Estoy en una cena de muy alto copete en Núñez de Balboa, entre Lista y Juan Bravo. En enero y febrero tendremos noticias buenísimas. Yo no tengo muchas accs la verdad. Menudas tías hay akí. “Cuelgo y corto”, como dice mi abuela.  Por consiguiente, cantemos.

La empresa avanza mientras retrocede la acción, su escaparate. Estar en Squirrel es subirse a cubierta de un barco para mirar hacia adelante y hacia atrás

Esta es la panorámica 

Ánimo que sólo quedan unos diez días para dejar atrás este mes fiscal. Luego tendrán que darnos buenas nuevas. Creo que será la acción de moda en 2026. Ya sabéis que a Eze la encontramos Adelaida y yo en el cementerio, nos dio pena y la metimos en nuestra capilla panteón. Luego llegaron Jóse y Anabel, la recogieron y la resucitaron. Ya goza de mucha salud. 

Aquellos que más protestan por la calidad de la comida o del servicio en un restaurante suelen ser los que peor comen en sus casas. Lo mismo ocurre con los accionistas de Ezentis. Los que hablan mal de Elias y de Anabel suelen ser los que menos acciones tienen de la empresa y aquellos que nunca podrán llegar a lo alto de la escalera social en que se halla cómodamente  instalado don José. Eze será un éxito y dará incluso dividendo, tal como advirtió la CEO.